Principios e importancia de la inclusión y equidad en la educación

La educación es una de las prioridades sociales. Es un derecho humano que actúa como base para impulsar un futuro sostenible, fundamentado en la paz y la tolerancia. En aras de propender por la calidad de la educación es necesario asegurar que todos los estudiantes sean incluidos en el proceso, garantizando condiciones y oportunidades igualitarias. Es a esto a lo que se refieren la inclusión y equidad educativa, tema protagonista de este artículo de la categoría «Educación Infantil».

Si continúas leyendo, descubrirás qué son y cuál es su importancia.

¿Qué es inclusión educativa y equidad?

Lo primero a saber al respecto es que todos los referentes internacionales que enmarcan la concepción de inclusión y equidad en la educación parten de entender al proceso educativo como un derecho fundamental que incide directamente en el desarrollo humano.

De esta manera, se entiende a la inclusión como un proceso que permite superar diferentes obstáculos y limitantes relacionados con la participación, presencia y alcance de logros de los estudiantes. La equidad asegura que dicha participación sea justa y que todos los estudiantes se consideren bajo la misma importancia.

De acuerdo con lo anterior, la inclusión y equidad educativa deberá propender por oportunidades de aprendizaje permanente; oportunidades que promuevan el desarrollo integral de los individuos, aportando así a la construcción de proyectos de vida.

Las políticas que se relacionan con este aspecto deben ser capaces de reconocer las diferentes dificultades de los individuos frente al sistema educativo. Esto significa que deberán considerar aspectos como la organización actual de dichos sistemas, las formas de enseñanza, el proceso evaluativo y los entornos de aprendizaje.

Principios claves de la inclusión y equidad en el ámbito educativo

De acuerdo con la Guía para asegurar la inclusión y equidad en la educación de la Unesco, los principios que rigen a este modelo son:

• Asegurar el valor de la presencia y participación de todos los estudiantes. Lo anterior, independientemente de sus características personales o su contexto.

• Reconocer y entender la diversidad y la importancia de esta en el ámbito educativo.

• Ser conscientes de las barreras a las que se enfrentan los estudiantes. Esto mediante el reconocimiento y análisis de las diversas situaciones que los exponen al fracaso, la exclusión y/o la marginación.

• Reconocer e identificar el potencial y capacidades de los sistemas educativos incluyentes. Siendo estos ideales para fomentar entornos de aprendizaje eficientes y de apoyo que garanticen la calidad de la educación.

• Identificar y aplicar los cambios necesarios para que la inclusión y equidad se convierta en un proceso activo y continuo. Es, a la vez, fundamental el seguimiento constante de estos.

¿Cuál es la importancia de incluir modelos equitativos e inclusivos en la educación?

Lo más importante a tener en cuenta en este aspecto es que la inclusión y equidad educativa es un proceso transformador que asegura la participación y acceso a oportunidades de aprendizaje de niños, niñas y jóvenes. Además es un proceso que respeta completamente la diversidad. De esta manera, brinda seguridad sobre la eliminación de todas las formas de discriminación.

Gracias a lo anterior, la educación se convierte en procesos y espacios que aseguran la creación de entornos de aprendizaje que brinden seguridad, pertenencia y calidad a cada uno de sus integrantes, respondiendo, claro, a sus necesidades y preferencias.

Es la equidad e inclusión la oportunidad ideal para que la cultura, la política y la práctica se transformen en los espacios educativos para permitir la interacción de la diversidad de identidades de alumnos y necesidades. Esto asumiendo el compromiso de eliminar obstáculos que les impidan avanzar. Además, favorece la participación plena, la accesibilidad, la asistencia y el buen rendimiento de los alumnos. El sistema se fortalece desde sus ejes centrales.

Conclusión

A modo de conclusión, vale la pena recalcar que para que los principios de inclusión y equidad se logren, se deberán buscar e instalar principios de diálogo y apertura. Estos serán ideales para identificar problemáticas y liberar tensiones. Además, se deben tener muy en cuenta elementos como leyes y políticas, gobernanza y financiamiento, libros de texto, docentes y personal de apoyo, escuelas y, por último, pero no menos importante, alumnos, familias y comunidades.

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